"Margen Protector", otro plan para el robo sistemático de territorio palestino por parte de Israél

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La gran ola de violencia sobre la población civil de Gaza aviva la concupiscencia por parte de miembros del parlamento israelí para expulsar de una vez a toda la población de Gaza (1.5 millones de personas) y así terminar por anexar de forma inmediata dicho territorio.

Las "Fuerzas de Defensa de Israel" (sic) anuncian a los habitantes de Gaza que van a bombardear el barrio donde viven. La población huye, abandonándolo todo en busca de refugio, a menudo en edificios bajo control de la UNRWA (siglas en inglés de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina y Medio Oriente).

Entonces, los tanques de las "Fuerzas de Defensa de Israel" arremeten nuevamente contra los civiles y los obligan a huir aún más lejos.

Hasta el 25 de julio de 2014 -o sea, 43 días después del secuestro de 3 jóvenes israelíes, secuestro que el gobierno de Netanyahu atribuyó al Hamas -sin presentar la menor prueba- y que sólo fue reivindicado por el Emirato Islámico (ex EIIL), las "Fuerzas de Defensa de Israel" ya han declarado inhabitable un 44% del territorio de Gaza.

Más de un millón y medio de personas se amontonan ahora en los 158 km² que Israel no ha atacado todavía, elevando allí la densidad poblacional a 10 000 habitantes por km², la más alta del mundo.

Iniciada por el general Moshe Yaalon, actual ministro de Defensa de Israel, para "arrancar el Hamas de raíz", la operación militar pudiera cambiar de objetivo ya que parte de los dirigentes israelíes quiere acabar de una vez y todas con el problema palestino expulsando a la mayoría de la población palestina hacia Egipto y Jordania y anexando parcial o totalmente la franja de Gaza.

Si se impone en Tel Aviv la opinión de esa facción, en este momento Israel podría anexar fácilmente un 44% del territorio de Gaza.



La "solución" para Gaza presentada por el vice presidente del parlamento israelí

A la sombra del secretario de Estado John Kerry, el secretario general de la ONU Ban Ki-moon, altamente agradecido ante el "compromiso dinámico" del jefe de la diplomacia estadounidense, está buscando en Jerusalén la manera de «poner fin a la crisis de Gaza». Pero Ban Ki-moon parece ignorar que existe alguien que ya encontró esa solución. El vicepresidente del parlamento de Israel, Moshe Feiglin, ha presentado, en efecto, un plan para "una solución en Gaza".

Ese plan se compone de 7 fases, conforme nos explica el renombrado cientista político, Manlio Dinucci :

1) El ultimátum, impuesto a la "población enemiga" a la que se intima a abandonar las áreas donde se encuentran los combatientes del Hamas "trasladándose al Sinaí, no lejos de Gaza".

2) El ataque, desencadenado por las fuerzas armadas de Israel "en toda Gaza con el máximo de fuerza (y no con una parte minúscula de esa fuerza)" contra todos los objetivos militares y la infraestructura «sin consideración alguna por los escudos humanos y daños al medio ambiente».

3) El asedio, simultáneo con el ataque, para que "nada pueda entrar en Gaza ni salir de Gaza".

4) La defensa, para "golpear con plena fuerza y sin consideración por los escudos humanos" cualquier lugar de donde haya partido un ataque contra Israel o contra sus fuerzas armadas.

5) La conquista, emprendida por las fuerzas armadas israelíes, que "acabarán con todos los enemigos armados en Gaza" y "tratarán conforme al derecho internacional a la población enemiga que no haya cometido fechorías y que se haya separado de los terroristas armados, [población] que será autorizada a abandonar Gaza».

7) La soberanía, sobre Gaza, «que se convertirá para siempre en parte de Israel y será poblada por judíos", contribuyendo así a "aliviar la crisis de alojamiento en Israel". A los habitantes árabes, quienes "según los sondeos en su mayoría quieren abandonar Gaza", se les ofrecerá "una generosa ayuda para la emigración internacional", ayuda que sin embargo se concederá solamente a "aquellos que no estén implicados en actividades antiisraelíes". Los árabes que opten por quedarse en Gaza recibirán un permiso de estancia en Israel y, después de cierto número de años, "los que acepten la dominación, las reglas y el modo de vida del Estado judío en su propia tierra" podrán convertirse en ciudadanos israelíes.

Ese plan no sale de la mente de un simple fanático sino del cerebro de un político que está obteniendo un creciente consenso en Israel. Moshe Feiglin es el jefe de Manhigut Yehudit (en castellano, "Liderazgo judío"), la facción más grande en el seno del Comité Central del Likud, o sea el partido en el poder. En 2012, durante la elección de la dirección del Likud, Moshe Feiglin hizo campaña en contra de Benyamin Netanyahu y obtuvo un 23% de los votos. Su ascenso ha sido continuo desde aquel momento, tanto que en julio de 2014 agregó a su cargo de vicepresidente del parlamento israelí el de miembro de la influyente Comisión de Relaciones Exteriores y de Defensa.

Si se analiza el plan que Feiglin está promoviendo activamente, tanto en Israel como en el extranjero (principalmente en Estados Unidos y Canadá), puede comprobarse que la actual operación contra la franja de Gaza incluye casi íntegramente las 4 primeras de las 7 fases previstas.

Visto desde esa perspectiva se percibe además que el verdadero objetivo de la retirada de los colonos israelíes de la región de Gaza -en 2005- no era otro que dejar el campo libre a las fuerzas armadas de Israel para la posterior realización de la operación "Plomo fundido" -en 2008/2009.

También se percibe que la actual operación "Margen protector" no es una simple respuesta a una acción anterior sino que, al igual que las operaciones anteriores, forma parte de un plan preciso, respaldado al menos por una parte consistente del Likud y tendiente a ocupar de manera permanente la franja de Gaza y a colonizarla expulsando de allí la población palestina. Y Feiglin seguramente ya tiene listo también el plan para "una solución en Cisjordania".