Visa y MasterCard se unen al recién creado sistema de procesamiento de pagos ruso, desarrollado como respuesta a las sanciones de EE UU, que bloquearon las tarjetas de varios bancos en 2014.
Visa y MasterCard han comenzado a procesar sus pagos en el sistema de pagos dentro de Rusia. Estos sistemas internacionales se han unido al recién creado Sistema Nacional de Pago con Tarjeta, que entró en funcionamiento el pasado 1 de abril y se considera el primer paso hacia la creación de un sistema financiero autónomo.
"El sistema nacional ya se han introducido. Con un coste pequeño y rápidamente se ha resuelto el problema de los pagos dentro del país", declaró Serguéi Jestanov, profesor de finanzas en la Academia Presidencial Rusa de Economía Nacional y Administración Pública.
En caso de que Visa y MasterCard no cumplan con los requisitos del Banco Central, tendrán que ingresar un depósito de seguridad, cuyo volumen estará directamente relacionado a los beneficios que obtengan. La consultora Morgan Stanley estima que serían 950 millones de dólares para Visa y 500 millones para MasterCard.
El Gobierno ruso decidió transferir todos los sistemas de pago a un control doméstico después de que varias entidades bloqueasen las tarjetas de determinados bancos rusos en marzo de 2014, tras la imposición de sanciones estadounidenses a Rusia tras la reunificación con Crimea.
Según Jestanov el procesamiento de las transacciones con tarjeta Visa mediante el nuevo sistema supondrá un nuevo trámite. El Gobierno ruso refuerza el control sobre las transacciones pero los sistemas de pago internacionales podrán seguir operando en Rusia.
"El potencial del mercado sin efectivo en Rusia es enorme", explica Antón Soroko, analista de Finam.
Visa firmó el acuerdo para operar con el nuevo sistema el pasado 19 de febrero y MasterCard el 19 de enero de este año. Por ahora los expertos rechazan hacer predicciones de éxito y se limitan a señalar que los protocolos de Visa son más complejos que los de MasterCard. "Solamente veremos si tiene éxito después de que el sistema asuma toda la carga", declara el analista Ilyá Balakirev de UFS.
El próximo paso será la impresión de tarjetas directamente para el sistema nacional, algo que se prevé para diciembre de este año.
El escenario se complica por la emergencia de operadores asiáticos como alternativa a los sistemas de pago occidentales. Inmediatamente después de que EE UU anunciase las sanciones contra Rusia, el banco chino UnionPay entró en el mercado ruso con su sistema de pago con tarjeta. En marzo de este año ha entrado Japan Credit Buerau. Se estima que en 2017 haya alrededor de dos millones de usuarios de estos sistemas.
Algunos de los bancos más grandes del país han avisado a sus clientes de posibles interrupciones en el servicio de pago con tarjeta. El pasado 30 de marzo Sberbank, el mayor emisor de tarjetas del país con 102 millones de copias, comenzó a transferir las transacciones en MasterCard al sistema nacional.
Mientras tanto, Rostislav Yanykin de Sberbank, declaró que las transacciones en Visa durarán hasta dos semanas, informa Interfax.
Por su parte, los miembros de Raiffeisenbank eran más pesimistas: "El éxito de las transacciones en esta situación depende de varios participantes, incluyendo al Sistema Nacional de Pago con Tarjeta, y por ello es probable que todavía se tarde un poco en resolver el problema", declaró el servicio de prensa de este banco.
Los bancos más pequeños fueron los primeros en adaptarse al nuevo sistema, concretamente el Banco BFA de San Petersburgo que anunció una adaptación completa el pasado 27 de marzo. "Para los clientes las operaciones con tarjeta serán iguales que antes", dijo un portavoz de BFA.
El pasado 25 el Tatfondbank de Kazán anunció que también había probado con éxito el nuevo sistema nacional.
Alekséi Lossan
Fuente: RBTH, 6 de abril de 2015
LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE CRÓNICA EN ZONA LIBRE.